Más alá de todo lo que aportó Carlos Delfino, por la lesión de Juan Pablo Cantero y por lo que sigue mostrando partido tras partido, sin dudas que hoy por hoy Argentina es «Prigioni-dependiente».
Es que el conductor, como tremendo base que es, no solo conduce -¡y como!- sino que aparece en el lado ofensivo cuando más lo necesita el equipo. Ah!, además no es una novedad decir lo que defiende.
Liderado por él, el goleo de Delfino y una gran efectividad desde más allá de los 6.25, Argentina le ganó 77 a 73 ayer a Brasil en un clásico super especial toda vez que era la primera vez que el conjunto «verdeamerelho» se medía con el albiceleste con Rubén Magnano -si, el mismo- como técnico brasileño.
Al término del primer tiempo, argentina ya imponía condiciones, pero un buen tercer cuarto de los brasileños, emparejó las acciones y así se llegó al ultimo parcial donde entre Delfino -terrible con los tiros a distancia-; Scola -dueño de una doble figura construida a base del sacrificio que solo él es capaz de desplegar-; Juan Gutiérrez -creciendo de la misma manera que lo fue haciendo Prigioni desde su aparición en el combinado nacional-; y el base, sellaron un triunfo por demás significativo ante uno de los «candidatos» -por personal y staff técnico- del casi ya iniciado Mundial Turquía 2010.
¿ «El dato»? Argentina jugó con casi la mitad de su plantel ya que a los lesionados Nocioni y Cantero, ayer se le sumó una molestia importante para Hernán Jasen.
No hay comentarios:
Publicar un comentario